Las mentiras de Cristina
Escribe: Juan Carlos Giordano
La presidente, para justificar los pagos de la deuda, ha dicho que con su gobierno “nos estamos desendeudando, no hay ajuste, hay más empleo y distribución de la riqueza”. Y desafió: “¿Cuál es el modelo que pretenden?”.
La presidente nos tiene acostumbrados a sus reiteradas mentiras. Hay pruebas contundentes que en su gobierno la deuda externa creció, hay ajuste, el desempleo y la pobreza ascendieron y la distribución de la riqueza es peor que en los años 90. Todo fruto de un modelo económico al servicio de grandes empresarios, banqueros y usureros internacionales.
Con los Kirchner la deuda creció
Lejos de desendeudarnos -consigna que vocifera el matrimonio presidencial desde el famoso pago de contado por 10.000 millones al FMI-, la deuda ha crecido con este gobierno. “Cuando nos sentamos nosotros a negociar en 2005, fue la primera vez que la Argentina ganó en una negociación con la deuda externa”, dijo Cristina (Página12, 27-01). Todos los gobiernos anteriores decían lo mismo. Los hechos lo desmienten.
Con el canje de 2005 los Kirchner reconocieron la deuda que había caído en default con el Argentinazo. Es decir, la volvió a resucitar. Y a pesar de una quita que, según el oficialismo, fue del 67%, pasamos de deber 145.000 millones a los 175.000 millones actuales.
Dijeron que no iban a negociar con los bancos que no entraran en el canje, y ahora están desesperados por hacer un nuevo canje con ellos, reconociéndoles 30.000 millones de dólares más. Además, dicen que van a pagarle al Club de París 7.000 millones que vienen de la dictadura. ¿Todo para qué? Para hacer buena letra, pedir nuevos préstamos al FMI y endeudar más y más al país.
¿No hay ajuste?
La presidente dice que ahora no hay ajuste. Pero ¿qué será ajuste para la presidenta? Sólo puede decir que no hay ajuste guiándose por los datos falsificados en forma delictiva del INDEK. ¿Acaso no hubo un feroz tarifazo en el transporte y en las boletas de luz y gas? ¿Acaso la inflación no va por el ascensor y los salarios por la escalera? ¡El 80% de las jubilaciones son de pobreza y el gobierno paga deuda externa con plata del Anses y el PAMI! ¿No le habrá pasado el ministerio de Trabajo las cifras que muestran que en estos meses se han perdido 400.000 puestos de trabajo, ha aumentado el empleo en negro y la precarización laboral? En el presupuesto 2010 se han bajado las partidas de Gasto Social, Salud y Educación. ¿Eso es o no es ajuste?
Además, el gobierno alardea que “hace obras”. ¿Dirán lo mismo los dos mil vecinos del barrio Los Eucaliptos, de San Francisco Solano, Quilmes, que hace 7 meses que están sin agua? ¡O los pobladores del segundo cordón del conurbano donde el 95% no tiene red cloacal y de agua! Prueba que de su modelo solo se benefician el FMI, las multinacionales, banqueros, automotrices y privatizadas.
¡Plata para salario y trabajo, no para la deuda!
Además del cerdo y el pollo, la presidente se refirió a “los buitres que están acá adentro… esos bichos negros y grandes que comen carroña”. Se refería a la oposición parlamentaria, haciendo electoralismo barato.
Es cierto que hay grandes buitres dentro del país que comen lo que produce nuestro pueblo pero, precisamente, esos buitres son los grandes beneficiarios de este gobierno. Buitre es Repsol que se lleva nuestro petróleo y el gas. Buitre es la Barrick que se lleva todo el oro, entre otros minerales y encima envenena. Grandes buitres son los bancos -encabezados por el Citibank- que hacen fabulosas ganancias. ¡Buitres salvajes son las privatizadas como TBA, Telecom, Telefónica y demás, que se han robado todo nuestro patrimonio nacional! Buitres son las multinacionales como la automotriz GM, que la presidente subsidió alevosamente. Buitres son la oligarquía terrateniente y los pooles de siembra que este gobierno se niega a tocar a pesar de su discurso contra la derecha.
El gobierno desafía a la oposición patronal diciendo “¿qué otro modelo proponen?”. Quien tiene un modelo opuesto al oficial es la izquierda. Nuestro partido llama a luchar por un plan económico obrero y popular, que parta del no pago de la deuda para volcar esos fondos a salario, trabajo, salud y educación. Reestatice todas las privatizadas bajo control obrero. Nacionalice la banca y el comercio exterior y expropie a las multinacionales y a toda gran empresa que cierra o despida, entre otras medidas de fondo.
El Socialista 03/02/10