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Fracasó el Golpe de Moyano, el Gobierno Confuso y Timorato

Fracasó el Golpe de Moyano, el Gobierno Confuso y Timorato


Entre titubeos y derrota en la opinión pública Moyano ordenó suspender el paro del Lunes 21

Por Carlos Petroni

Fracaso el golpe sindical de Hugo Moyano. Quería paralizar el país y movilizar hacia la Plaza de Mayo para apretar al gobierno de CFK para que lo libere de las ingentes causas judiciales que lo aquejan.

Hubo declaraciones que en la jerga del gobierno deberían haberse considerado “destituyentes” y el Kirchnerismo puro entró en zafarrancho de confusión sobre las medidas y acusaciones lanzadas por el camionero. El frente entre ellos, los barones del conurbano, los caciques provinciales y la burocracia Moyanista parecía derrumbarse.

Hubo negociaciones y concesiones para lograr que Moyano bajara los decibeles de su paranoia de creer que parte del gobierno estaba por soltarle la mano y mandarlo en cana. Hay una estrategia de limarlo lentamente, pero no de confrontación directa con el. El camionero les gano de mano.

En la conferencia de prensa inicial cuando se lanzo la idea del paro y la movilización, el Secretario de Prensa de Camioneros, Altamirano, lanzo dardos para todos lados: contra el gobierno, especialmente Timmerman, los opositores burgueses como Carrió, la ex Ministra Ocaña, la prensa y el que esto suscribe.

Durante veinticuatro horas, los enviados de Moyano a los medios, incluyendo los del odiado multimedios, su abogado Llermanos (el ex juez de las muzzarelas) y otros reprodujeron los insultos, la idea de las conspiraciones y la apretadas contra todos y todas. Muy instructivo, mientras mas hablaban públicamente y expresaban sus opiniones libremente, mas se hundían en la opinión publica los planes de su jefe en la CGT.

¿Nadie les dijo a estos espadachines de la burocracia sindical que contra acusaciones concretas se ofrecen pruebas concretas y no insultos y calumnias del tipo “son mitómanos”?

Por lo que toca a este escritor, que lo llamaran mitómano por afirmar en la justicia que “Moyano mantuvo estrechas relaciones personales, políticas, sindicales y hasta económicas con altos jefes operativos de la CNU/Triple A en los 70 y en muchos casos hasta ahora” ya le valió al camionero, a sus sindicatos y a su abogado, Llermanos y algún otro perejil una causa penal – a punto de iniciar su etapa oral y publica – por calumnias e injurias y dos juicios civiles por daños y perjuicios.

Con la repetición de las calumnias en los últimos días, solo han empeorado su causa y los sujetara a nuevas denuncias penales. No parece un camino muy inteligente para tomar, ¿verdad? Así solo se mueven los que pretenden impunidad asegurada.

El gobierno procedió a negociar, hacer algunas concesiones menores como sacar un comunicado diciendo que “Moyano no esta directamente investigado en Suiza” y todo pareció esfumarse en el aire. ¿Desapareció realmente el problema?

Lo que nadie dice es que el llamado al paro de Moyano estaba destinado al fracaso desde su anuncio. No podría sostenerlo contra los trabajadores que respondieron con enojo e irritación. Desde camioneros a empleados de Comercio, desde maestros a obreros de fabrica se indignaron ante la posibilidad de parar para defender los negocios mafiosos amenazados de Moyano y su séquito.

Hubo indignación porque el paro lo decidió Moyano y lo suspendió Moyano, pasando por arriba de todas las estructuras sindicales, y utilizando claramente un lenguaje de defensa de lo indefendible. Los trabajadores no están ni estaban dispuestos a perder sumas no remunerativas, premios y jornales por el hombre que los traiciona en las paritarias y los reprime cuando protestan por fuera del control de sus matones.

De esa oposición frontal en la sociedad, claro, se colgaron los opositores burgueses y cuanta persona tuvo la oportunidad de expresarse. El camionero había metido la pata hasta el caracú.

Ahora vendrán las consecuencias. De la cobardía del gobierno que nunca salió a pararle la mano a Hugo Moyano y su cohorte de adulones e incapaces, de las amenazas y aprietes no se vuelve. Habrá represalias contra el camionero, solapadas quizá, pero represalias al fin y abundaran – por lo menos esa es mi intención – nuevos juicios por intimidación publica, calumnias e injurias, contra la burocracia sindical. Moyano es un Tigre de Papel. Este levantamiento del paro les recuerda a todos que hace unos añicos, bajo el gobierno de Duhalde, suspendió otro paro por…. “el mal tiempo.” Ahora, ni eso, porque el pronostico del tiempo daba bueno a muy bueno en la mayor parte del país.

Un gobierno vacilante, cauteloso, frente al Frankestein que supo crear con subsidios y operaciones económicas de todo tipo, no es un buen indicador para la salud política del Frente para la Victoria. De eso tampoco se vuelve. CFK se perdió la oportunidad de oro de ganarse un 15% adicional de votos si hubiera hablado en forma decisiva contra lo que no fue otra cosa que un intento de golpe burocrático contra el gobierno.

No ayuda que Tomada, De Vido, Fernández y otros Ministros hayan salido a minimizar la situación y poner paños de agua tibia al volcán en plena erupción. De eso tampoco se vuelve.

El paro decretado y levantado en forma unipersonal por Moyano era un paro reaccionario, no para defender los derechos de los trabajadores sino para proteger a los burócratas de la cárcel y las criticas permanentes.

Es una verdadera tragedia que la izquierda en general no haya salido a denunciarlo y a movilizarse contra el. También perdieron una oportunidad que les costara en el futuro. De los silencios en cuestiones claves de la política nacional, tampoco se vuelve.

El descrédito en el que incurrieron los medios oficialistas como Tiempo Argentino, Telam, 678 y tantos otros que se atropellaron con el discurso del camionero, se mantuvieron confusos y tuvieron que esperar la palabra oficial en los teléfonos para salir a justificar la situación les asesto a estos medios un golpe terrible.

La situación de ambivalencia del gobierno, por otro lado, sembró la confusión entre los Kirchneristas puros, su jóvenes recién ingresados a la política y los Montoneros aggiornados… todo parecía retrotraerlos al pasado de los 70, con una Juventud Sindical Peronista agrediendo, con la sombra de la Triple A sobre volando la escena política…

Todo no ha quedado como estaba. Hay muchos insatisfechos en todos los campos. Un seguro gatillador de crisis y explosiones por venir. Algo se ha roto y no se lo puede volver a pegar. Es solo cuestión de tiempo. Moyano fue y será un golpista. Lo fue en el 76 cuando apoyaba al sindicalista de los militares en la Gobernación de la Provincia de Buenos Aires, Victorio Calabró y lo es ahora. Y los peronistas Kirchneristas lo saben.

20/03/11