una alianza de nueve años
Las gestiones que hizo el camionero para facilitar los negocios de Covelia.
Empresarios, intendentes y competidores dan cuenta de cómo operó Moyano para favorecer a la firma que ahora investiga la Justicia suiza.
Por Emilia Delfino
La relación Moyano-Covelia es la de un matrimonio en el que una de las partes controla a la otra, pero ambas se benefician. El amor es fuerte pero, cuando se trata de una sociedad de negocios, las ganancias pueden tanto como el amor.
Esa historia se originó en 2002, cuando el líder de Camioneros y la empresa comenzaron a actuar como socios políticos. Una anécdota puede ilustrar bien esa alianza: según pudo reconstruir PERFIL de fuentes empresarias, Covelia había adquirido en 2010 unas 120 camionetas para correo, por recomendación de Moyano. Ricardo Depresbiteris, titular de Covelia, confiaba en el buen juicio del secretario general de la CGT, pero sabía que sus conocimientos sobre correos son escasos.
La inversión le daba vértigo pero cumplió con el pedido del gremialista. Moyano quería que Covelia se quedara con el negocio que dejaba vacante la norteamericana Ryder, pero Depresbiteris lo convenció de que Covelia comprara los automóviles pero no se metiera directamente en el negocio del correo. Moyano le encomendó que buscara otras compañías para tercerizar el servicio, evitar así que el Grupo Macri monopolizara el mercado de correo privado, y que se mantuvieran las fuentes de trabajo de Ryder. Depresbiteris negoció como intermediario de Moyano con distintos empresarios de correos. Cada vez que se reunía con uno de ellos informaba a Moyano lo que le respondía cada directivo invitado y a su vez transmitía lo que el líder sindical resolvía.
La alianza Moyano-Covelia creció exponencialmente, como los negocios. Además de hacer la recolección y el barrido en San Miguel, Merlo, Lomas de Zamora, Lanús, San Martín, Escobar, Esteban Echeverría, Quilmes, Tres de Febrero, Partido de la Costa, Pinamar y Bahía Blanca, y el servicio de traslado de los materiales de los cartoneros desde la Ciudad a la Provincia, la empresa compró el año pasado una planta de reciclaje de residuos que aspira a generar energía para las industrias.
A raíz de esa sociedad política, los rumores de que Moyano podría ser el verdadero dueño de la empresa comenzaron a correr entre los intendentes del Conurbano, que se veían presionados por Moyano para contratar a Covelia, desplazando a las competidoras, y mantener los costos del servicio por las nubes.
El caso más emblemático fue el de Esteban Echeverría. En febrero de 2008, el intendente recién electo Fernando Gray tuvo que solicitar a la ONG Poder Ciudadano que se hiciera cargo de la licitación de la basura ante las presiones de los Moyano para que no rescindiera una millonaria contratación directa que el intendente anterior había firmado con Covelia, como reveló entonces PERFIL.
En noviembre de 2006, Pablo Moyano le propuso al intendente de Necochea, en medio de un paro de los recolectores, que rescindiera el contrato de Servicios Ambientales SA y contratara a Covelia.
Perfil 21/03/11