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No es el tren de la alegría, pero es algo

No es el tren de la alegría, pero es algo

Pedrazza preso

Ver salir a Pedraza [burócrata mayor de los ferroviarios] esposado de su «humilde casa» de u$s 900.000 en Puerto Madero, fue un buen despertar del martes

Pero eso sólo no es justicia. La detención e indagatoria por su participación como organizador, junto al “Gallego” Fernández y Gustavo Arcorcel, del homicidio calificado de Mariano Ferreira y las tentativas de homicidio del resto de los tercerizados y quienes se solidarizaron con ellos, no nos hace olvidar que la misma jueza que lo encarcela es la que se niega a llamar a los directivos de UGOFE, gerenciadores del FFCC Roca, para que expliquen por qué, el 20 de octubre pasado, dieron permiso para salir libremente a los miembros de la patota de sus puestos de trabajo; la misma que no cita a los funcionarios de la Secretarí­a de Transporte para que expliquen cómo funcionan las tercerizadas, por qué se permiten, a quién pertenecen, cuánto decide el gobierno en todo esto, y, por último, la misma jueza que, en vez de incluir en la misma causa a la policí­a que liberó la zona y garantizó la impunidad de los ejecutores, nos distrae con una causa paralela.

Esta justicia tiene en su poder, desde hace dos meses, los mismos elementos que ahora la llevan a detener a Pedraza, a Fernández y a Alcorcel. Fue la movilización en la calle, los cortes de ví­a, la denuncia permanente, lo que los metió presos.

En este juicio no sólo se están poniendo a luz a los asesinos materiales e intelectuales de Mariano. Pedraza, aparte de ser el organizador del plan criminal, que culminó con el asesinato y las heridas de Elsa Rodrí­guez, Nelson Aguirre y Ariel Pintos, está vinculado a la tercerizadora ferroviaria, disfrazada de Cooperativa, «Unión del Mercosur» que según los listados en manos de la jueza incluirí­an, para ingresar prontamente, a los miembros de la patota de Barracas que no son ferroviarios.

Y así, hay un doble aspecto para pensar las razones del ataque. Por un lado, mantener el gremio con rienda corta y dar una «buena lección» a los trabajadores tercerizados que se vienen organizando desde hace más de dos años, y a las organizaciones que los apoyan. Por el otro, frenar la lucha para no efectivizar a nadie y mantener así­ el negocio de las tercerizadas, las que cobran por contrato o tarea, una suma negociada entre la Unión Ferroviaria, UGOFE y la Secretarí­a de Transporte, y luego pagan a sus trabajadores cifras miserables quedándose con la diferencia o con las coimas [sobornos] que les pasan los «otros» dueños de las tercerizadas.

Pedraza, abandonado por la CGT -ocupada en negocios «menos sucios» y más redituables como los del «Momo» Venegas, Zanola y otros con los medicamentos truchos que los pueden salpicar a todos- también está investigado por escuchas telefónicas ordenadas por la jueza luego de las primeras siete detenciones, cuando se habrí­a intentado sobornar a un miembro de la Cámara de Casación Penal para que los libere. Esto, más el intento de estropear la bala que asesinó a Mariano por parte del perito de parte de Uño, boletero ferroviario y uno de los imputados de la patota, complica más al grupo de asesinos y matones y empieza a mostrar la soledad y desesperación en que están entrando los Pedraza.

La pelea por el juicio y castigo a los asesinos de Mariano Ferreyra no terminó, y falta la parte más difí­cil, que es no permitir que se retroceda y avanzar sobre la burocracia de la Unión Ferroviaria, la empresa privatizada y sobre el gobierno, socios los trea, en las alturas de la corruptela capitalista.

En el Roca, los más de 1.600 compañeros tomados efectivos a partir de la organización de los tercerizados, lucha dolorosamente potenciada con el asesinato de Mariano, deben convertirse en la punta de lanza, junto a los cuerpos de delegados opositores de los ferrocarriles Sarmiento y Belgrano Norte y activistas y delegados antiburocráticos de las demás lí­neas, para barrer lo que queda, pudriéndose, de Pedraza en el ferrocarril.

Como dijo nuestra compañera Marí­a del Carmen Verdú, en nombre de Nelson Aguirre y Elsa Rodríguez en la audiencia ante la Cámara Criminal, refiriéndose a los detenidos: “Son todos los que están, pero no están todos los que son”. Faltan la UGOFE, la Policí­a, y la Secretarí­a de Transporte y el resto del gobierno. Vamos por todo, y por todos.

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