Cristina se presenta
No a la reelección del modelo
Cristina anunció su candidatura y hasta el próximo sábado tiene plazo para designar quién la acompañará en la fórmula. Con ella, salvo que presente la suya Proyecto Sur, quedan registrados todos los candidatos para competir en las internas obligatorias del 14 de agosto como paso previo para llegar al 23 de octubre. Internas que se hicieron bajo la mentira de “transparentar la política”, las cuales perdieron sentido, ya que los partidos patronales van con sus listas cocinadas de antemano. Sólo queda el piso proscriptivo del 1,5% contra la izquierda y partidos menores. El FRENTE de IZQUIERDA se prepara para superarlo.
Por los radicales irá Alfonsín con De Narváez. La UCR inscribió una alianza con el Partido Federal de Manrique. Duhalde, después del “papelón” al suspender la interna trucha del Peronismo Federal, va con el apoyo de Aldo Rico. Carrió se presenta sola. Rodríguez Saá lo hizo con el partido de Raúl Castells y la Ucedé. Binner se unió con la ex radical Stolbizer y se separó de Pino Solanas. Contra todos ellos va a dar pelea el FRENTE de IZQUIERDA. Unidad que hemos logrado entre el Partido Obrero, PTS y nuestro partido, Izquierda Socialista, concitando el apoyo de otras fuerzas de izquierda, trabajadores, jóvenes y más de 500 intelectuales, artistas y personalidades (ver página 6).
En el acto del día de la bandera, Cristina dijo: “Estamos cumpliendo el sueño de Belgrano. Estas son las políticas que él quería”. Anteriormente se había considerado la “Sarmiento del Bicentenario”, mientras entregaba computadoras. Al gobierno, a pesar que las encuestas dan que ganaría las presidenciales si se hicieran hoy, no le queda otra que invocar a héroes patrios para evitar hablar de temas que lo salpican. Muchos compañeros dicen “estamos mejor”, comparando con la crisis de 2001. O que el problema es “la derecha” de los Macri, De Narváez y Duhalde. Algunos llegan a decir, ante el caso Schoklender, que “corrupción hay en todos lados”. ¡Pero, ojo! Si bien el crecimiento sigue, la creación de puestos de trabajo se ha estancado. Quiere decir que se produce con más explotación obrera. El trabajo en negro creció, reconocido hasta por el propio INDEK. Y la concentración y extranjerización de la economía es peor que en la década del 90. Y alertamos sobre lo que se viene. El gobierno, después de las elecciones, quiere recortar los subsidios en los rubros electricidad y transporte, lo que implicará un aumento de tarifas. El año que viene tendrá que salir a pedir prestado 7.000 millones de dólares para cubrir los 12 mil que tiene que pagar de deuda externa, lo cual significará más endeudamiento, no “desendeudamiento”. Eso redundará en una baja de los presupuestos sociales. Que el gobierno se niegue a darles el justo aumento que piden los docentes de Santa Cruz, adelanta el futuro. Todo lo que se logró fue fruto de reclamos y luchas, no por bondad del “modelo” kirchnerista. A esto hay que sumarle que los efectos de la crisis capitalista mundial nos van a afectar cada vez más, y sus consecuencias intentarán ser descargadas sobre las espaldas de los trabajadores. Ya sufrimos un ajuste vía la inflación, salarios de pobreza y no pago de las actualizaciones judiciales a los jubilados, entre otras pruebas que este modelo no redistribuye la riqueza.
Hay y habrá que seguir apoyando las luchas como la de los docentes de Santa Cruz (ver página 3). Al nuevo sindicalismo combativo contra la burocracia sindical. Y ante las elecciones, nos queremos dirigir muy especialmente a los trabajadores y demás sectores populares que se inclinan por apoyar al gobierno, para que piensen muy bien antes de hacerlo. Si consideran que cada voto que saque el gobierno será para “profundizar el modelo” -creyendo con esto que el kirchnerismo otorgará más salarios, jubilaciones o plata para salud y educación-, se equivocan.
Cada voto que saque el oficialismo será para que enfrente a los que luchan, como lo hace Cristina y el gobernador Peralta contra los docentes de su provincia. Para que sigan las patotas contra quienes reclaman. Cada voto para el kirchnerismo será para mantener la inflación, la manipulación del INDEC y el pacto con los Moyano, Zanola, Gerardo Martínez y Cavalieri. El gobierno utilizará cada voto para seguir adelante con la corrupción, como lo muestra el caso Schoklender y el enriquecimiento de sus funcionarios como el ex secretario de Transporte, Ricardo Jaime, aún en libertad. Para cooptar a los organismos de derechos humanos, para que no luchen y defiendan al gobierno. Cada voto a Cristina será para que sigan las tercerizadas y el trabajo en negro. Para que se mantengan los subsidios siderales a las privatizadas del transporte mientras el pueblo viaja como ganado. Para que la Barrick Gold y demás multinacionales mineras sigan con el saqueo de nuestras riquezas. La Repsol con nuestro petróleo. Y que se profundice el pacto con los Menem, Barrionuevo, Gioja, Insfrán y los corruptos intendentes del conurbano.
Tampoco es salida votar por la UCR, el peronismo disidente, el PRO o la Coalición Cívica. La oposición patronal ya gobernó para los ricos y el FMI. O Pino Solanas, tras los pasos de un nuevo Frepaso (ver páginas centrales).
En cambio, cada voto que saque el FRENTE de IZQUIERDA será para postular una alternativa obrera y popular. Para acompañar, impulsar y encabezar los reclamos cotidianos por aumento de salarios y jubilaciones al valor de la canasta familiar. Cada voto al FRENTE va a ser “útil” para bregar por la unidad de la oposición en los gremios y cuerpos de delegados para barrer a la burocracia sindical. Mantener a Pedraza en la cárcel y que paguen todos los culpables del asesinato de Mariano Ferreyra. Fortalecer al sindicalismo combativo y antiburocrático y terminar con la criminalización de la protesta social. Para luchar contra las tercerizaciones y el pase a planta, como hicieron los ahora ferroviarios del Roca. Para terminar con el robo de las privatizadas, peleando por la reestatización de todo el patrimonio nacional bajo control obrero y por la expropiación de las multinacionales. Por la nacionalización de la banca y el comercio exterior. Para evitar más muertes por abortos clandestinos, luchando para que se haga realidad la consigna “anticonceptivos para no abortar, aborto legal para no morir”. Cada voto al FRENTE servirá para que, si sacamos diputados, como lo acabamos de hacer en Neuquén, estén al servicio de las luchas. Ejemplo que desde hace años lo viene dando nuestra diputada de Córdoba Liliana Olivero. En definitiva, el voto al Frente será para que, desde ahora, durante y después de las elecciones, hagamos más fuerte una alternativa política de los trabajadores, para fortalecer todos estos reclamos y seguir bregando por la unidad de la izquierda.
El Socialista 22/06/11