No hay crisis cuando se trata de financiar a la iglesia católica: 1231 millones de euros en tres años
por Kaos. Con las iglesias hemos topado
Finalmente el gobierno ha debido presentar esos datos: ha entregado a la Iglesia católica en los últimos tres años (2009, 2010 y 2011) al menos 1.231 millones de euros en distintos conceptos.
Nos hemos enterado cuando respondió a las preguntas parlamentarias de joan Saura sobre la financiación pública de la iglesia.
Según informaciones aparecidas en la publicación 20 minutos, al tiempo que el gobierno consiga estos datos, deja muy claro que «no piensa modificar en esta legislatura el acuerdo que desde 1979 permite al Estado financiar a la Iglesia, y que además esta partida presupuestaria no sufrirá recortes ni ajustes. Dicho y hecho. Los Presupuestos 2012 anuncian que las arcas públicas transferirán 6.000 millones a la Iglesia, una cifra equivalente a la de 2011«.
Esta publicación informa que el ingreso más alto corresponde a la asignación tributaria, esto es, al dinero proveniente de esa pequeña casilla marcada por los y las contribuyentes en la declaración de la renta: 247,9 millones en 2009, 259,3 millones en 2010 y 342,2 millones el año pasado. En total, 849,4 millones.
Es hora de despertar! ¿podemos seguir financiando a esta iglesia fascista y enemiga del pueblo y aliada del capital y el oscurantismo?
Esta es la nota de 20 minutos:
El Estado ha entregado a la Iglesia católica en los últimos tres años (2009, 2010 y 2011) al menos 1.231 millones de euros en distintos conceptos. Así lo reconoce el Gobierno en una respuesta parlamentaria al senador del grupo Entesa y ex alto cargo de la Generalitat catalana Joan Saura, que presentó una batería de preguntas sobre la financiación pública de la Iglesia.
Aunque el periodo analizado corresponde al anterior Gobierno socialista, el Ejecutivo de Rajoy desglosa varias partidas de financiación. Eso sí, no están todas las que son. El montante más alto corresponde a la asignación tributaria que ha recibido la Iglesia, la casilla que marcan los contribuyentes en su declaración de la Renta: 247,9 millones en 2009, 259,3 millones en 2010 y 342,2 millones el año pasado. En total, 849,4 millones.
Los acuerdos con la Santa Sede firmados hace 33 años establecían que la Iglesia debía «lograr por sí misma los recursos suficientes para la atención de sus necesidades». La Conferencia Episcopal, por su parte, nunca ha considerado como financiación estatal el 0,7% del IRPF, ya que argumenta que son los fieles los que aportan el dinero a través de sus impuestos.
Cárceles, bibliotecas…
El IRPF está destinado a cubrir el mantenimiento de la estructura de la Iglesia, y es distinto a otras aportaciones que recibe la Iglesia por los servicios que presta en campos como la educación, la sanidad o los servicios sociales.
No entendemos por qué la financiación de la Iglesia no sufre recortes como otras partidas sociales En la respuesta parlamentaria, el Gobierno reconoce que por ejemplo en estos tres años se han pagado 2,3 millones para «atención del culto en los centros penitenciarios«. En relación a las cantidades percibidas por la Iglesia para el mantenimiento de su patrimonio cultural, el Estado desembolsó en ese trienio 31,5 millones. También se ha sufragado desde las arcas públicas el «inventario de bienes de titularidad eclesiástica»: otros 1,7 millones.
«En proyectos destinados a la restauración de bienes culturales«, el Gobierno asegura que se han pagado otros 49,8 millones. Las bibliotecas de centros culturales y educativos dependientes de la Iglesia también han recibido 534.000 euros.
La Administración central también paga las nóminas de los profesores de Religión de algunas comunidades, las que renunciaron a esta transferencia. Se trata de Andalucía, Aragón, Canarias, Cantabria y las ciudades autónomas de Melilla y Ceuta. En total, 209 millones de euros. Por último, las subvenciones para programas de cooperación y voluntariado se llevaron 86,7 millones.
El senador Saura explica a 20 minutos que en la respuesta del Gobierno «no están todos los pagos que hace el Estado. Hay opacidad y falta de transparencia. No entendemos por qué la financiación de la Iglesia no sufre recortes como otras partidas sociales».
09/04/12