Máxima tensión entre Israel y Siria desde la Guerra de Yom Kippur

Publicado por Emiliano G. Arnáez

La región de los Altos del Golán, meseta ubicada en la frontera entre Israel, Líbano, Jordania y Siria, es un valioso enclave estratégico que fue protagonista a lo largo de la historia de graves conflictos bélicos tanto por su importancia geopolítica militar como por sus recursos hídricos. Esta semana se están reviviendo momentos de máxima tensión que remiten a la Guerra de de Yom Kippur de 1973 en el marco del denominado “conflicto árabe-israelí”.

En este caso, como consecuencia de la cruel guerra civil que ocurre en Siria desde enero de 2011 (con más de 36.000 muertos), los enfrentamientos entre leales al presidente Bashar al-Assad y los rebeldes al régimen, un mortero cayó en una zona despejada de los Altos del Golán, controlado en la actualidad por Israel. Se cree que los morteros son producto de los combates por lo que desde Israel interpretaron que la artillería no parecía ir dirigida a sus blancos.

Sin embargo, los tanques israelíes dispararon este lunes contra territorio sirio en respuesta al impacto del proyectil. Se trata del segundo ataque de Israel contra Siria desde los “disparos de advertencia” efectuados ayer domingo.

Esta señal podría provocar que, lo que hasta era un conflicto interno de Siria (salvo por los ataques en la frontera con Turquía, por los cuales Damasco ya extendió formales disculpas), se convierta en un peligroso conflicto regional.

Según consignan analistas de Estados Unidos, Israel no tiene simpatía alguna por Assad, quien concedió durante años refugio y apoyo a los enemigos más enconados del estado israelí. Sin embargo, el gobernante sirio —y su antecesor, que era su padre— mantuvieron la paz fronteriza durante cuatro décadas, un factor excepcional de estabilidad en esta inestable región.

Temores fundados. Israel teme que si el régimen de Assad es derrocado, el país pueda caer en manos de extremistas islámicos que pudieran asirse del arsenal químico sirio.

12/11/12