Vinculan al general Milani con un represor de Córdoba
Por Daniel Santoro
El alto jefe militar y su hermano, dirigente kirchnerista de Cosquín, son primos de un ex sargento condenado por el crimen de un estudiante en 1976. Y esa municipalidad financia a una productora de la familia del ex militar.
El ex sargento Miguel Angel “Perico” Pérez sería un represor más y en los organismos de derechos humanos sólo se lo recordaría por la frialdad con que actuaba durante la dictadura si no tuviera relaciones familiares con el actual jefe del Ejército, general de división César Milani.
“Perico” Pérez fue condenado a prisión perpetua porque en julio de 1976 ejecutó de un balazo al estudiante de periodismo y militante del PRT-ERP Raúl “Paco” Bauducco en el patio de la cárcel cordobesa UP-1 de barrio San Martín, en Córdoba (ver “Bauducco…).
Ese año, luego de hacer el servicio militar en el Ejército, se “enganchó” como cabo, es decir sin egresar de la escuela de suboficiales Lemos. Una fuente dice que su primo y joven subteniente lo “ayudó” a hacer los trámites de “enganche”.
La madre de Milani, Olga Pérez, es hermana del padre de “Perico”, afirmó la revista cordobesa “Política a Punto”, es decir el represor es “primo hermano” del jefe del Ejército, confirmaron dos fuentes de la política y de los organismos de derechos humanos. Este caso se suma al de la desaparición del soldado Alberto Ledo (Ver “El caso del asistente…”).
Luego, “Perico” Pérez fue destinado a la Fábrica Militar de Río III, donde maltrató a sus conscriptos. Uno de ellos –que pidió no ser identificado– recordó que “nos levantaba a la madrugada y nos hacía meter en el río helado”.
Cuando se reestableció la democracia en 1983, Pérez dejó el Ejércto y durante años fue “ contratista de la Municipalidad de Cosquín, a través de Perico Producciones”, una pequeña agencia publicitaria que hacía trabajos para la comuna. El era el camarógrafo.
Luego de ser detenido por crímenes de lesa humanidad en el 2010, Perico Producciones quedó en manos de su esposa Miriam Moyano, que siguió relacionada comercialmente con el municipio. Incluso, una de las hijas del represor trabaja en la municipalidad en el área administrativa de la Comisión Nacional de Folclore, encargada del tradicional festival.
La familia Pérez tuvo llegada con el intendente, Marcelo Villanueva, porque ambos tienen estrecha relación con el caudillo peronista Rodolfo “Rody” Milani, hermano del nuevo jefe del Ejército.
Por esa relación, dicen las fuentes, Villanueva mantuvo esos contratos con la familia Pérez. Villanueva llegó a la intendencia de Cosquín en 2003 gracias al apoyo de “Rody” Milani, quien lidera la unidad básica “César Milani”, que lleva ese nombre en homenaje a su padre. Su antecesor, Alberto Bustos, llegó en 1999 al gobierno municipal de Cosquín también con el decisivo apoyo del aparato que maneja Rody Milani. “Villanueva, luego de ser funcionario delasotista durante diez meses y volver a la municipalidad, quedó solo. No maneja el Concejo Deliberante ni el Tribunal de Cuentas; incluso nosotros lo denunciamos por malversación de fondos y peculado y fue imputado por esos delitos por el fiscal Martín Bertone”, le dijo a Clarín el concejal socialista Gabriel Musso, que integra el frente Proyecto Cosquín.
Cosquín cobijó a otro represor; Andrés “Barba” Cabrera, un ex miembro de la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE) procesado por crímenes de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura en Santa Fe, y sospechado de haber querido secuestrar en México al dirigente montonero Mario Eduardo Firmenich.
Miembros de organizaciones de derechos humanos cordobesas le habrían mandado mensajes informales a Martín Fresneda, secretario de Derechos Humanos de la Nación, contándoles sobre estas relaciones político-familiares de Milani con un represor, afirmó una fuente.
Colaboró: Córdoba. Corresponsalía
Clarin 14/07/13