Visita del presidente Xi Jinping y 150 empresarios
¿A qué vienen los chinos?
Una vez más, como hace 10 años lo hizo Néstor Kirchner, Cristina está anunciando que el presidente chino y los empresarios que lo acompañan brindarán una vigorosa ayuda en inversiones y desarrollo económico. Una vez más, se repiten las mentiras y el doble discurso kirchneristas.
Escribe: Mercedes Petit
En 2004, con la visita de Hu Jintao -anterior presidente chino- Néstor Kirchner anunció inversiones por 20.000 millones de dólares y distintos beneficios que otorgaría al país la dictadura del Partido Comunista de ese país. Esas prometidas inversiones nunca llegaron. Pero el gobierno y grandes empresarios chinos fueron avanzando en suculentos negocios para ellos. En 2004 la balanza comercial era positiva para Argentina en 1.230 millones de dólares. En 2013, es deficitaria en más de u$s 5.030 millones. La relación comercial con China ha servido para profundizar el carácter de productor de materias primas de Argentina y de comprador de productos manufacturados. Le vendemos el 90% del poroto de soja. Mientras tanto, los empresarios chinos comenzaron a instalar sus fábricas de aceite.
El saqueo de Africa y América Latina
El gobierno anuncia que nos beneficiarían las inversiones chinas. Esto es falso. Veamos su papel en Africa. Desde hace años China saquea vorazmente allí las materias primas y se ha convertido en el principal socio comercial, desplazando de ese primer puesto al tradicional Estados Unidos. El 30 por ciento de los bosques de Africa central están bajo concesión a empresas chinas, y han sido alquiladas 227 millones de hectáreas en Sudán, Liberia, Etiopía y otros países. Más del 60% de las exportaciones africanas a China son bienes primarios, principalmente petróleo, seguido de mineras, diamantes y maderas (Clarín, 13/7/2014).
En relación a América Latina, ya es el principal socio comercial de Brasil, Chile y Perú. Sus rubros predilectos de saqueo son el petróleo (en Venezuela, Cuba y Brasil), la minería (Perú), la soja y otros bienes primarios, mientras venden todo tipo de productos manufacturados que ellos producen con mano de obra de bajísimos salarios o directamente semiesclava.
Y si vienen las inversiones, ¿beneficiarían a los trabajadores y el pueblo?
Quizá, a diferencia de 2004 con Néstor, ahora Cristina logre inversiones chinas. Esto no significaría ninguna “salvación” ni beneficios para los trabajadores. No solo por lo que hemos dicho de la vida en China y su papel en Africa u otros países de América Latina. Ya señalamos que en 10 años han puesto la balanza comercial en un importante saldo negativo. Les estamos comprando material ferroviario (vagones, vías), componentes de electrodomésticos o electrónica e infinidad de productos que se podrían producir acá. Se han sumado al saqueo del petróleo adquiriendo a la familia Bulgheroni el 50% de la petrolera Bridas. Y luego ésta adquirió el 60% de Pan American Energy.
Mientras tanto, le vendemos la mayor parte de la soja, profundizando el carácter de “granero”. Y hace pocos meses compraron el 51% de Nidera, una de las más grandes cerealeras y oleaginosas del país. También pretenden vender la instalación de vías férreas hacia los puertos, para abaratar y controlar el transporte.
En síntesis, lo que podemos esperar de esta visita es grandes ganancias para los empresarios chinos (con alguna miguita para los empresarios locales y los funcionarios intermediarios), más saqueo y mayor deuda externa, por los compromisos que logren con préstamos o inversiones que los beneficien a ellos.
El Socialista 16/07/14