Después del paro de ATE: Hace falta un verdadero plan de lucha
Escribe Pablo Almeida – Delegado general ATE Ministerio de Economía
El paro nacional de ATE y la movilización unitaria a Plaza de Mayo con 25.000 trabajadores del pasado 24 de febrero fue una enorme demostración de fuerza contra el ajuste. Esta medida de lucha que surgió como una exigencia por abajo de los trabajadores que en cada repartición veníamos enfrentando los despidos en forma aislada, logró dar una primer respuesta de conjunto al ajuste macrista.
La movilización marcó la predisposición de los trabajadores estatales para salir a enfrentar los ataques sean del gobierno nacional como de los gobiernos provinciales y municipales de distintos signos políticos. En todo el país pararon y marcharon trabajadores estatales con una masividad como no sucedía hace prácticamente una década. En el ministerio de Economía cerca de 500 compañeros participamos de la movilización luego de recorrer durante horas con una ruidosa batucada el Palacio de Hacienda. También se destacó la participación de trabajadores de distintas dependencias nacionales, donde la jornada de lucha se hizo sentir con fuerza, como el ministerio de Trabajo de la Nación, el ex ministerio de Planificación y otros.
La jornada también dejó al descubierto que hay una gran voluntad de lucha en sectores no estatales que aún no han encontrado un canal de expresión por la traición de las conducciones burocráticas de las distintas CGT. Una voluntad de lucha que se expresó en las nutridas columnas de docentes de los Sutebas combativos, de aceiteros y de ferroviarios del ferrocarril Sarmiento.
La masividad y contundencia de la jornada del 24 plantea hacia delante un desafío enorme porque está claro que, pese al miedo a los despidos, existe una gran predisposición en la base para salir a enfrentar al gobierno de Macri. Lamentablemente los discursos de los dirigentes de ATE no dieron muestras de brindar continuidad como reclama la situación. Daniel Catalano, Secretario General de ATE Capital (quien responde a la Verde y Blanca kirchnerista), hizo uso de la palabra para hacer una defensa del pasado gobierno kirchnerista, incluido el plan Qunita. Nada dijo, a diferencia del secretario general de ATE Nacional “Cachorro” Godoy, por supuesto, de la precarización que se extendió como mancha de aceite en el kirchnerismo.
Mención aparte merecen las dos CTA. El titular de la CTA Micheli ni siquiera estuvo en el palco, mostrando su profunda crisis. Y Yasky, si bien movilizó, tan poco fue parte del escenario diciendo posteriormente que habría que hacer alguna otra acción… ¡pero recién después del 24 de marzo!
El gobierno de Macri sigue con los despidos en el INADI, la Superintendencia de Riesgos del Trabajo y otras dependencias. Y el ajuste se hace sentir en forma brutal con la inflación creciente que carcome el poder adquisitivo del salario.
Así como logramos con el empuje desde abajo arrancar este enorme paro y movilización, es imprescindible que ahora logremos poner en pie un plan de lucha. Para ello desde cada asamblea y repartición hay que seguir reclamando un plenario de delegados con mandato para imponer un verdadero plan de lucha unificado hasta derrotar el ajuste.
El Socialista 02/03/16