¡10.000 pesos de básico para todos!
La devaluación de enero implicó un golpe brutal contra el salario de los trabajadores. El gobierno amenaza con fijar aumentos por decreto. La canasta familiar ya está en 10.000 pesos para una familia tipo. Moyano habla de 3.000 pesos de emergencia para todos pero no llama a luchar. Para imponer estos reclamos hace falta un plan de lucha nacional en camino a un paro general de todo el movimiento obrero.
La devaluación incentivó aún más el alza de precios. De una semana a otra, todo aumentó. La carne trepó un 20 por ciento. Shell aumentó un 12 por ciento las naftas y se habla de una suba generalizada en combustibles. Los elementos de la construcción parecen inalcanzables y los electrodomésticos se han convertido en bienes suntuarios. Los medicamentos se fueron por las nubes. Y la lista sigue. Si enero ya había comenzado con un salto inflacionario importante, que incluyó el tarifazo en el transporte, la devaluación profundizó aún más el alza. Mientras los “precios cuidados” son una burla.
Cerca del 50 por ciento de los trabajadores perciben salarios inferiores a los 4.000 pesos. Mientras tanto, según mediciones sindicales, de algunas provincias y privados, la canasta familiar ya alcanza los 10.000 pesos y amenaza con seguir subiendo.
Por otra parte, el escenario es desgarrador para los jubilados a pesar de los anuncios de Cristina. Igual ocurre con la Asignación por Hijo y los planes sociales.
¿Cuánto hay que pedir?
Frente a esto, la burocracia no hace más que amagar. Moyano bramó por una suma fija de 3.000 pesos para todos los trabajadores, pero no hace nada para conseguirla. Sería una suma insuficiente pero, en la emergencia, aunque sea por eso, hay que llamar a que fije un paro y plan de lucha para imponerlo. Caló pide 1.500 y dijo que “a la gente no le alcanza para comer”. Y puso un ejemplo: “Un metalúrgico tiene que trabajar 2 horas para comprar un kilo de durazno a $50”. ¿Y? Tampoco impulsa ninguna iniciativa. Es más, busca negociar una suma “puente” paliativa para patear las paritarias hacia… ¡abril! Mientras el ajuste, la devaluación y la suba de precios está haciendo estragos ahora.
Stella Maldonado, de la Ctera, también estaría por tirar todo para más adelante. Mientras muchos gobernadores ya están debatiendo miserables subas del 20% y en cuotas para los docentes argumentando las “crisis provinciales”.
La semana pasada, los aceiteros obtuvieron una suma fija de 2.000 pesos, a cuenta de futuros aumentos. Y dos pagos no remunerativos de 4.100 cada uno (8200). En total, 10.000 de emergencia. Además, ellos cobran un inicial de 9.700 pesos y se aprestan a reclamar el 35 % o más en las paritarias. Ese debe ser el ejemplo a seguir para recuperar en parte lo perdido y evitar que la inflación se siga comiendo los salarios. Los bancarios lograron $ 1.800 a cuenta. Los choferes de larga distancia $1.200 y $70 por día de viáticos. Pero el gobierno dejó a esas patronales que suban los boletos un 25%. O sea, trasladan los aumentos de salarios a los precios con el aval de Cristina y Tomada.
Además, el gobierno “popular” ha dicho que está en contra de cualquier suma fija, amenaza con fijar aumentos a la baja por decreto o apela a la conciliación obligatoria cuando hay una lucha justa. Un claro “cepo” a los justos reclamos salariales.
Paro y plan de lucha nacional
Es necesario pelear por una suma de emergencia para paliar la sideral suba de precios. El reclamo debe partir teniendo en cuenta que la canasta familiar asciende a 10.000 pesos, cifra que de básico debe ganar todo trabajador, indexado mensualmente mediante una cláusula gatillo. Y tomar como referencia para pedir en las paritarias 2014 la inflación real que se calcula ya en 40% anual. En enero ya será del 4 a 5 por ciento. Además, hay que plantear que no haya despidos ni suspensiones. Y los reclamos pendientes: abajo el impuesto al salario y que se termine con la precarización laboral.
Llamamos a todos los trabajadores, cuerpos de delegados, comisiones internas, más allá de donde estén encuadrados sindicalmente o a qué “central” pertenezcan, a organizarse en asambleas y a debatir petitorios, iniciativas y medidas de lucha para reclamar un aumento de emergencia. Y a Moyano, que pide 3.000 pesos para todos, a retomar el camino del exitoso paro del 20N de 2012 y un plan de lucha junto a la CTA Micheli y otros sindicatos que se sumen. Sólo así podremos contrarrestar el alza de precios.
El Socialista 05/02/14