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Masacre de Curuguaty – Juicio Oral y Público Día 2-

Masacre de Curuguaty – Juicio Oral y Público Día 2-

 

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Tras la sorpresa que se vivió en el primer día del juicio a los campesinos paraguayos por la Masacre de Curuguaty, por la estrategia de los acusados de cambiar intempestivamente a sus abogados por los oficiales, ayer se vivió la segunda jornada. Otra vez la sorpresa: los campesinos volvieron a cambiar de abogados y abandonaron a los oficiales por un tercero. La estrategia quedó desnuda: la intención era aplazar el juicio. Pero el tribunal fue implacable y el debate se retomará el próximo lunes. Aquí, la segunda crónica de Ángel Fernández Schejtman, mientras aguardamos su regreso para escuchar, el próximo jueves desde las 19 hs. Paraguay Vive, por Radio La Retaguardia, su información de primera mano como observador internacional en el juicio.

Por Ángel Fernández Schejtman para La Retaguardia

Este juicio que tiene como únicos imputados a los campesinos, a pesar de que hubo 17 muertos, entre las victimas 11 campesinos asesinados y 6 policías, decenas de heridos, todos víctimas de la misma maniobra. Tanto policías como campesinos comparten las mismas necesidades y exclusión. Recordamos que segundos antes de que comience la balacera, hubo manos desarmadas en alto, hubo gritos de «todos somos paraguayos, no nos matemos entre nosotros». Fue en vano, la Masacre ya estaba planificada y en marcha.
Así hoy vemos en el banquillo de los acusados solamente campesinos, ¿será que ellos mismos mataron a 11 de sus compañeros?, ¿será que mientras corrían a esconderse de la balacera, mataron a 6 policías? ¿Dónde están las balas que se extrajeron de los cuerpos?. Son preguntas que se suman a muchas otras, con el mismo resultado, la certeza de que esto fue y es una matanza programada.
Matanza que sigue sumando re victimizaciones. La desesperación y el secuestro emocional con que se somete a la razón, la lógica, el derecho, no tiene limites.
El establishment paraguayo, estronista de origen y con convicción totalitaria, en su afán de ser explicito, obsceno, no admite cortapisas. No alcanza con someter, hay que exterminar cualquier atisbo de rebelión; aun el gesto mínimo de esquivar el golpe, es reprimido con brutalidad.
Eso es este juicio: un compendio de lo que no debe suceder, un Estado precario en todas sus líneas, sostenido por fuera del mundo, encerrado en el circuito del Poder del miedo y el abuso.
En este día de pesadilla mágica, la «genial» maniobra, que supuestamente alejaría en el tiempo la condena adelantada de 35 años de prisión (condena pre establecida en cualquier causa que involucre a campesinos), se cayó como un castillo de naipes.
La estrategia de abandonar a los abogados que durante tres años se jugaron en esta defensa, poniendo de ellos no solamente un coraje civil sin limites, sino también una habilidad técnica digna de admiración, jugaron su futuro profesional, su credibilidad y hasta sus bienes personales, condición impuesta para conseguir varias de las prisiones domiciliarias. Algo inédito: los doctores Ferreiro y Morales, esos son sus nombres, quedaron a la intemperie, les costará mucho recuperar credibilidad y clientes, ya que en una «magistral» maniobra diabólica, el presidente del Juzgado Oral, el día 27 de Julio, al momento de renunciar a la representación que venían llevando a cabo, indujo uno a uno a los campesinos, quienes literalmente dijeron el fundamento a la decisión tomada era la falta de confianza en sus representantes. Ignoran los procesados que sumaron un nudo a la horca, esta manifestación fehaciente, ya que fue hecha dentro de un proceso oral, es irreversible y tal vez pasado el tiempo, al momento en que haya que recurrir a las instancias internacionales para buscar Justicia, este detalle les jugará en contra, toda vez que en los hechos, para ellos, es más confiable el Estado.
Hoy trataron de concretar la «genialidad» renunciando nuevamente a la defensa de oficio y nombrando un nuevo abogado particular, que a la hora de actuar lamentablemente demostró una condición muy precaria, insuficiente para el desafío que les toca a los imputados. La respuesta fue un latigazo: el aplazo que pensaron sería prolongado en años, se acortó a seis días. El lunes 3 de Agosto comienza el camino inexorable, se termina el plazo, sí o sí comienza el juicio.
La maraña es confusa, pero tiene un pecado de origen desde la carátula. Los «beneficiarios» del desalojo, los Riquelme y su pandilla de stronistas, nunca presentaron el titulo de propiedad, no estaban legitimados ni para dar el primer paso en su reclamo; hacia ahí apuntaba la defensa de los doctores Ferreiro y Morales. Las reprochables medidas procesales desde la foja uno del expediente son nulas de nulidad absoluta; del mismo modo, todos los abusos subsiguientes no hacen más que sumar delitos al delito original: el prevaricato. Como decíamos al principio, la obscenidad del abuso y la impunidad irreverente, hizo que en el día de hoy que el Presidente del tribunal oral, mediante un acto de sincericidio, manifestara que el plazo obedece a la presión que ejercen la prensa y los Observadores, ya que ellos piden una rápida resolución de esta causa, recién luego de esta confesión invoco artículos del Código Penal.
Así está la Causa de la Masacre de Curuguaty. Mientras tanto, los grupos de militancia social: SERPAJ Paraguay, Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, Articulación Curuguaty, OLC, Asociación Jueces por la Democracia, MST -Brasil, Organización Indígena Campesina, y otras, a las que se suman colectivos de Victimas de las Dictaduras, siguen y seguirán lado a lado a los campesinos, sin perder de vista que los policías también son víctimas de esta Masacre; ellos, todos ellos merecen tener Justicia, REPARACIÓN y de una vez por todas, ser liberados de este secuestro perverso en el que están sumidos.
La Masacre de Curuguaty no le pasa al Paraguay, nos está pasando a todos en la Región Sur de la Patria Grande. Es una operación para hundir definitivamente la Unidad en la Diversidad que se nos viene negando desde el principio de los tiempos.
Acá estamos, acá estaremos junto a ellos, pero con lo ojos bien abiertos y en alerta constante.

fuente: La Retaguardia Radio

Anred 30/07/15