EL MOYANISMO SEÑALA A SU ENEMIGO
Viviani contra la IV Internacional
En el acto de la CGT en memoria de Saúl Ubaldini el ultimo 30 de marzo, el dirigente de los taxistas Omar Viviani ensalzó a Hugo Moyano señalándolo como “uno de los grandes líderes del movimiento obrero” y advirtió que por esto mismo, el secretario general de la CGT “hoy está siendo atacado por lo que decía el General Perón, por la Cuarta Internacional”.
Para finalizar Viviani aclaró el linaje de la actual dirigencia arengando que “nosotros -que nacimos de la base peronista, de lo que nos enseñó Perón y Eva Perón, de lo que nos dejaron José Ignacio Rucci, Saúl Ubaldini, Lorenzo Miguel, y miles de compañeros- no vamos a bajar los brazos aunque nos sigan golpeando” (ver video: http://www.youtube.com/watch?v=COID…). Es decir que el enemigo de los dirigentes sindicales no son los patrones que explotan a sus trabajadores, sino los militantes de la izquierda revolucionaria.
Los he conocido de naranjo
Con esta frase Perón acusaba a la “Cuarta Internacional” de querer desestabilizar a su gobierno en enero de 1974. De esta manera Perón habilitaba la acción de las Tres A contra los militantes de izquierda, la JP y el activismo obrero y estudiantil y tiempo después, el 1º de mayo de 1974, insultaba a en Plaza de Mayo a la Tendencia y daba su apoyo a los “dirigentes sabios y prudentes” de la burocracia sindical -de los Rucci y Miguel- que integraba las bandas parapoliciales de la ultraderecha peronista.
Un fantasma asusta a los burocrátas
La amenaza de la burocracia se debe a que el trotskismo es la corriente revolucionaria histórica de la clase obrera y el socialismo internacional que lleva inscripta en sus banderas la lucha a muerte contra todo tipo de burocracia que oprima al movimiento obrero. En el Programa de Transición de 1938 la Cuarta Internacional declara que en esta lucha los trotskistas forman “parte activa en la vida de los sindicatos de masa, preocupándose de robustecer y acrecentar su espíritu de lucha”, combatiendo “contra todas las tentativas de someter los sindicatos al estado burgués y de maniatar al proletariado con ‘el arbitraje obligatorio’ y todas las demás formas de intervención policial”. Los trotskistas declaramos abiertamente que nuestro objetivo es expulsar a la burocracia de los sindicatos “proponiendo atrevida y resueltamente en los momentos críticos nuevos líderes dispuestos a la lucha en lugar de funcionarios rutinarios y carreristas” además de crear, “en todos los casos en que sea posible, organizaciones de combate autónomas que respondan mejor a los objetivos de la lucha de masas contra la sociedad burguesa”. El trotskismo es la única corriente revolucionaria del movimiento obrero que plantea claramente la expulsión de la burocracia de los sindicatos y su regeneración mediante la democracia obrera y la independencia de clase frente al estado capitalista y los políticos patronales.
El trotskismo es el fantasma de una dirección revolucionaria del sindicalismo de base que aqueja a los Moyano, Viviani, Pedraza y Cía.
http://www.pts.org.ar/spip.php?article17405
Verdad Obrera 15/04/11