votar el 14 de agosto por el Frente de Izquierda!
Ya estamos a pocos días de las “internas abiertas” del 14 de agosto. La primera vez en la Argentina que vamos a una elección donde “no se elige nada”. Sólo se definirá si se silencia o no a la izquierda en las presidenciales de octubre. Tenemos que jugarnos con todo para lograr los 400.000 votos e impedirlo.
La mayoría de la clase trabajadora y demás sectores populares recién se van enterando ahora: el 14 de agosto hay una “rara” elección. Día a día seguimos encontrándonos con compañeros que nos preguntan exactamente qué se vota. Algunos, incluso después que les explicamos, no terminan de entender. Y es lógico. Porque efectivamente se trata de algo ridículo: una elección “interna”, pero obligatoria, en la que cada partido tiene un único candidato presidencial. Cualquiera nos diría que, “si hay un solo candidato de cada partido ¿para qué se vota?”.
Los kirchneristas dicen que será como una gran “encuesta”, en la que Cristina debe sacar más del 40% de los votos para quedar bien posicionada hacia octubre. Los políticos patronales opositores dicen que será, también, como una gran encuesta para ver “quién sale segundo”. El compañero, a esta altura nos preguntaría: “¿pero entonces para qué me hacen ir a votar? Lo que ninguno de los políticos patronales dice y oculta cuidadosamente la propaganda oficial, es que en esta “elección primaria obligatoria” se define otra cosa: si la izquierda no saca el 1,5% del total de votos (alrededor de 400.000) quedará proscripta de la elección de octubre, donde ahí sí, “de verdad”, se elegirá presidente, diputados, senadores e intendentes. ¡Sí, por primera vez desde la caída de la dictadura, la izquierda puede quedar afuera de una elección presidencial! Se trata de una medida antidemocrática descomunal, nunca vista en estos 28 años.
Por eso cuando muchos compañeros se enteran, se indignan, y nos dicen que nos van a votar, aún cuando no compartan la totalidad de nuestros planteos o piensen votar a otros candidatos en octubre. Estamos haciendo una feroz campaña para dar a conocer esta cláusula terrible de la nueva Ley de Reforma Política, recorriendo fábricas, barrios y lugares de estudio. Los spot del Frente donde denuncian que quieren silenciarnos, han ayudado mucho para hacer conocer este intento proscriptivo. Miles de compañeros en todo el país que los han visto, van expresando públicamente su voluntad de votarnos para romper la trampa.
El Frente de Izquierda, ese reclamo de unidad que nos hicieron tantas veces miles de luchadores, es, sin duda, la mejor herramienta que tenemos para derrotar la proscripción. Esta vez habrá una única voz de la izquierda, unitaria, una única candidatura presidencial, una boleta donde todos nos jugaremos a sumar. El Frente de Izquierda, nuestro frente, consiguió suscitar gran entusiasmo entre muchos compañeros que expresaron su adhesión y se acercan a colaborar. Logró un excelente debut en Neuquén, consiguiendo entrar a la legislatura provincial; hizo muy buena elección en Santa Fe, logrando interesantes votaciones en Rosario y en el Cordón Industrial, logrando incluso una concejal en Capitán Bermúdez. Si bien la polarización no permitió que se reflejara electoralmente, realizó una gran campaña militante en la Ciudad de Buenos Aires. Esta semana, también, tras una impresionante campaña, nos jugaremos a reelegir a nuestra compañera Liliana Olivero a la legislatura de Córdoba. Y se viene el desafío más grande: romper la proscripción nacional, logrando los 400.000 votos en todo el país.
En estos últimos días tenemos que jugarnos con todo. Sabemos que gran parte de esos votos deben obtenerse en la Provincia de Buenos Aires, y en particular, en el Conurbano. El territorio de los punteros, de los matones del PJ, de lo peor de los intendentes corruptos. Donde nos harán una y mil maniobras para robarnos los votos. Pero también sabemos que los votos se cuentan de a uno. Por eso es fundamental el aporte de cada compañero en cada rincón del país. En las 19 provincias donde el Frente presenta candidatos. E incluso, en las otras, donde ya hay compañeros que se ofrecen a fiscalizarnos el 14. Ni un afiche debe quedar sin pegar, ni un volante sin repartir, ni un compañero de trabajo, estudio, vecino o familiar sin visitar. A todos les debemos alcanzar nuestra propuesta y la boleta. Tenemos que invitarlos a que nos ayuden, que se armen cadenas de votos, que fiscalicen con nosotros el domingo 14. Porque ese día se juega una parte importante de las libertades democráticas en la Argentina.
¡No podemos dejar que silencien a la izquierda!
El Socialista 03/08/11