¡Que la inflación no se coma nuestros salarios!
Los aumentos de precios son cada vez mayores. El gobierno autorizó expresamente a Sancor y la Serenísima aumentar los lácteos entre un 4% y un 19% según los productos. También permitió subas en las cuotas de los colegios. Al mismo tiempo, todas las marcas y tipos de nafta aumentaron de golpe la semana pasada, en un promedio del 6%. Ya no existe gasoil a menos de 3 pesos el litro.
El propio Indec, aún con sus números truchos, tuvo que reconocer las subas. La inflación de marzo “le dio” 1,1%, con un acumulado para el primer trimestre de 3,5%. Siempre tomando los números oficiales, el rubro “Alimentos para consumir en el hogar” acumula 6,1% de aumento en los tres primeros meses del año. Son los valores más altos desde que se truchan los números, en enero de 2007.
Yendo a mediciones un poco más cercanas a la realidad, la Facultad de Ciencias Económicas de la UBA calculó una inflación del primer trimestre de 7%, con una estimación para todo el año del 40%.
La bronca de los trabajadores crece. Recordemos que, a principios de año, las patronales, el gobierno y la burocracia sindical decían que se habían puesto de acuerdo en pactar aumentos por todo el año de entre el 15 y el 19%. Pero la presión de las bases logró quebrarlos en muchos gremios: los bancarios consiguieron un aumento donde las categorías más bajas equiparan la canasta familiar (4.600-4.800 pesos), los aceiteros lograron el 36%. Entre los gremios que todavía no firmaron, los trabajadores de la Alimentación piden un básico de 3.200 -y un aumento del 30%-. La UOM va por un 25% de aumento, habiendo declarado un paro que no se pudo concretar porque le decretaron la conciliación obligatoria.
Por su parte, Luz y Fuerza y la Unión Ferroviaria, que firmaron aumentos del 22 y 20%, lo hicieron por seis meses. Esto es un ejemplo claro de hasta dónde se puede llegar con la presión desde abajo: el objetivo del gobierno, las patronales y la burocracia era que todo se negociara por un año y nadie reclamara más en 2010. Pero no lo pudieron sostener.
Estos avances son importantes, pero no alcanza. Estos aumentos logrados en paritarias son sólo para los trabajadores en blanco, dejando afuera a la mitad de la fuerza laboral en negro. Y porque la inflación se acelera mes a mes. Los aumentos de sueldos apenas si alcanzan para recuperar (y no en todos los casos) lo perdido en 2009. Por eso decimos que hace falta un aumento general de emergencia, para todos los gremios, de 1.500 pesos como mínimo, aparte de todo lo que se está negociando.
Moyano, que va y viene, un día defendiendo al gobierno y al otro diciendo que la guía para negociar es “el INDEC de los supermercados”, no unifica ningún reclamo. Deja a cada gremio librado a su suerte. Si en muchas negociaciones se están imponiendo aumentos por arriba de lo que se esperaba, es para descomprimir un poco para que la bronca no estalle, no por la actuación de los burócratas.
Llamamos a la CGT y CTA a que terminen su tregua con el gobierno. En vez de marchar con el oficialismo cuando éste se lo requiere, tendrían que definir un plan de lucha para unificar un pedido de aumento de emergencia para todos, que se indexe mes a mes con el costo de vida. Este es el camino para recuperar nuestro poder adquisitivo y no volver a perderlo en un par de meses.
Los negocios de Moyano
El gobierno acaba de aprobar la creación de la ART de Camioneros. Un gran negocio, ya que la misma, donde figuran en su directorio tres de los siete hijos de Hugo Moyano, además beneficiará a un holding de empresas vinculadas a Camioneros, entre las que se encuentran Covilia, recolectora de residuos; Ivetra, que realiza controles de cargas en el puerto de Buenos Aires, a las que hay que sumarle las empresas de transporte de pasajeros que entre colectivos y trenes suman a casi 200.000 trabajadores a los cuales se juega a cubrir la ART en formación.
También la mutual de camioneros estaría a punto de quedarse con los terrenos del Club Comunicaciones -valuados en U$S 30 millones-. Y ya se supo de los hoteles 5 estrelas para los burócratas del gremio de Camioneros, ya que es difícil que sus trabajadores puedan pagar sus altas tarifas. Está claro que para el líder de la CGT son más importantes los negocios que ponerse al servicio de la lucha de los trabajadores.
Hugo Yasky lanza su candidatura
La Central de Trabajadores de la Argentina (CTA) acaba de realizar un acto donde anunció el lanzamiento de la Agrupación Germán Abdalá, la que servirá de base para promover la reelección de su secretario general, Hugo Yasky, en las próximas elecciones a realizarse el 23 de septiembre. Dicho acto fue acompañado por agrupaciones kirchneristas como la Corriente Martín Fierro y el Movimiento Evita, y representantes del partido Nuevo Encuentro, que dirige Martín Sabatella. Lejos de delinear un plan de lucha para que docentes y estatales puedan triunfar en sus reclamos por aumento de salario (gremios adheridos a la CTA como CTERA y ATE), para Yasky la prioridad pasa por el lanzamiento de su candidatura en la central obrera.
El Socialista 21/04/10