Opositores convocan a reunir un millón de manifestantes en Egipto
EL CAIRO. Una coalición de grupos hizo un llamado para que un millón de personas tomaran el martes las calles de El Cairo para aumentar la presión para que dimita el presidente Hosni Mubarak, al tiempo que líderes de diversos países también apremian para que haya una transición ordenada hacia un sistema democrático. La coalición de grupos, que incluye a la clandestina Hermandad Musulmana, dijo que quiere que la marcha que salga de Tahrir, o Plaza de la Liberación, obligue a Mubarak a renunciar para el viernes. Los grupos también convocaron a una huelga general para el lunes, aunque mucho de El Cairo sigue inactivo, pues los bancos, las escuelas y la bolsa de valores continuaban cerrados.
La gente formaba largas filas frente a las panaderías en un esfuerzo por comprar pan, la principal fuente de alimentación de muchos egipcios.
Alambres de púas acordonaban la principal carretera hacia Tahrir, una plaza central céntrica que los manifestantes han venido ocupando desde el viernes, convirtiendo el lugar en un punto del foco nacional de exhortaciones para derrocar a Mubarak, a quien responsabilizan de la pobreza generalizada, la inflación e indiferencia oficial y brutalidad durante los 30 años que ha ocupado el poder.
Miles de personas se congregaron en Tahrir desde la mañana. Muchos durmieron sobre el césped o en coloridas tiendas. Otros se deslizaron hasta la plaza desde muy temprano.
«No queremos volver a la vida normal hasta que Mubarak no se vaya. Deseamos que la gente deje sus trabajos hasta que él se vaya», manifestó Israa Abdel-Fattah, uno de los organizadores de la protesta y uno de los fundadores del grupo 6 de abril, un movimiento popular que ha venido exigiendo reformas democráticas desde el 2008.
Varios países enviaron aviones a fin de evacuar a sus ciudadanos de la revuelta mientras los líderes mundiales exhortaban a Mubarak a que implemente reformas y busque una solución pacífica a la crisis.
La economía de Egipto tomó otro giro el lunes cuando la firma Moody’s Investors Service redujo la calificación de los bonos gubernamentales de Egipto de Ba1 a Ba2 y cambió su panorama de estable a negativo.
La televisión estatal informó que Mubarak dio instrucciones al nuevo gabinete a fin de que alivie el peso económico de los ciudadanos. Los diarios estatales también informaron que Mubarak le había pedido a su nuevo primer ministro para que inicie reformas y garantice una «mayor participación» de los partidos políticos.
Un alto funcionario de la Hermandad Musulmana dijo a The Associated Press que el movimiento fundamentalista quiere formar un comité de grupos de oposición junto con el ganador del Premio Nobel y líder reformista Mohamad El Baradei a fin de unir a los grupos que, por separado, piden la dimisión del presidente Hosni Mubarak.
Saad el-Katatni dijo el lunes que su grupo no había elegido a El Baradei para que los representara. La Hermandad Musulmana, declarada ilegal, es el movimiento opositor más grande de Egipto y quiere formar un Estado islámico en la nación árabe más poblada.
«No hemos nombrado a nadie porque no queremos que nadie esté solo a cargo», destacó el-Katatni said.
La Hermandad Musulman desea formar un estado islamista en la nación de mayor población árabe. Su base social parte de una gran organización social, médica y de servicios educativos. Tuvo una sorprendente representación parlamentaria en las elecciones del 2005, obteniendo el 20% de los escaños legislativos, pero no logró un solo escaño en las elecciones del año pasado y se cree ampliamente que las elecciones fueron fraguadas a favor del partido gobernante de Mubarak
LaClase 31/01/11