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Raúl Castro: “el exceso de centralización conspira contra el desarrollo de la iniciativa de la sociedad”

Raúl Castro: “el exceso de centralización conspira contra el desarrollo de la iniciativa de la sociedad”

RAUL EN EL CONGRESO

 

El presidente de Cuba, Raúl Castro, consideró que la aplicación de medidas en el modelo económico y social del país, como la supresión de la libreta de alimentación, serán imprescindibles para mejorar el sistema nacional.
Kaos. Cuba   Telesur/Cubadebate   17-4-2011

El presidente de Cuba, Raúl Castro, consideró que la aplicación de medidas en el modelo económico y social del país, como la supresión de la libreta de alimentación, serán imprescindibles para mejorar el sistema nacional y remarcó que los nuevos planes deberán estar enfocados en el fortalecimiento de la institucionalidad y en el avance hacia una paulatina descentralización.

“La supresión de la libreta de alimentación no constituye un fin en si mismo, sino una de las principales medidas que serán imprescindibles aplicar para erradicar las profundas distorsiones existentes en el funcionamiento de la economía y de la sociedad en su conjunto”, señaló Raúl Castro, en su discurso inaugural del VI Congreso del Partido Comunista del país, que inició este sábado.

En el cónclave, que sesionará durante cuatro días consecutivos, se debate el Proyecto de Lineamientos de la Política Económica y Social del Partido y la Revolución.

La libreta de alimentación, diseñada para cubrir la nutrición a más de 11 millones de cubanos, fue “introducida en los años 60 con una vocación igualitaria en momentos de escasez, para proteger a nuestro pueblo de la especulación y el acaparamiento con fines de lucro por parte de unos pocos”, argumentó.

Raúl Castro recordó que dos generaciones de cubanos “han pasado su vida bajo el sistema de racionamiento, que, a pesar de su nocivo carácter igualitarista, brindó durante décadas a todos los ciudadanos el acceso a los alimentos básicos a precios irrisorios altamente subsidiados”.

El presidente consideró nocivo el sistema porque con el pasar de los años se ha convertido en “una carga insoportable para la economía y en un desestímulo al trabajo, además de generar ilegalidades diversas en la sociedad”.

Ante ese escenario, el mandatario señaló que desde el Gobierno no se puede “decretar de golpe” la eliminación de ese sistema, sin crear las condiciones para ello.

Se hace necesario “realizar otra transformación del modelo económico, en aras de incrementar la eficiencia y la productividad del trabajo de modo que se pueda garantizar con estabilidad, niveles de producción y oferta de los productos básicos a precios no subsidiados y a la vez accesibles a todos los ciudadanos”.

Avanzar con solidez y sin retrocesos

El presidente garantizó que el Estado continuará asegurando a toda la población por igual y de manera gratuita los servicios de educación y salud. Además seguirá promoviendo la cultura, el deporte y la defensa de la soberanía.

Remarcó que el Gobierno también garantizará el orden público, tras resaltar que “distinguen a Cuba por ser uno de los países más seguros del mundo, sin narcotráfico, sin niños y adultos mendigos, sin ejecuciones extrajudiciales, cárceles clandestinas ni torturas a pesar de las campañas que se orquestan contra nosotros, ignorando que estas realidades son derechos humanos fundamentales”.

El presidente Raúl Castro abogó para que Cuba transite con orden, disciplina y con la participación de los trabajadores, hacia un sistema descentralizado, en el que prime la planificación como rasgo socialista de dirección.

La compresión plena de tales conceptos le permitirán a Cuba “avanzar con solidez y sin retroceso en la paulatina descentralización de facultades desde el gobierno central hacia las administraciones locales, y desde los ministerios y otras entidades nacionales en favor de la autonomía creciente de la empresa estatal socialista”.

Son muchos los aspectos que impiden el desarrollo de las fuerzas productivas en Cuba, por lo que el mandatario instó a que la “mentalidad de la inercia debe ser desterrada definitivamente” del país.

Durante su discurso el mandatario también anunció la realización de una Conferencia Nacional del Partido Comunista de Cuba (PCC), para finales del mes de enero de 2012, con el objetivo de que en ese encuentro se establezcan conclusiones sobre las modificaciones de los métodos y estilos de trabajos del movimiento político,