Gustavo Cisneros: de “fascista” a “bolivariano”
Por: Rafael Uzcátegui
Que el gobierno bolivariano sea más y no menos globalización lo evidencia, el tipo de actores económicos que han prosperado y emergido durante su mandato.
Gustavo Cisneros: de “fascista” a “bolivariano”
Por: Rafael Uzcátegui
Que el gobierno bolivariano sea más y no menos globalización lo evidencia, el tipo de actores económicos que han prosperado y emergido durante su mandato.
¡Enviamos médicos y no soldados!
Como parece ser una constante del mandato de Cristina, otra vez una movida política del Ejecutivo generó una crisis política de magnitud. El gobierno queda fuertemente golpeado y debilitado, desenmascarando su faceta pro imperialista y profundizando su divorcio con el movimiento de masas. Hasta la presidente tuvo que suspender su viaje a China “para no dejar solo a Cobos” y enviar al Congreso la propuesta de despido de Redrado.
Fue publicado en Rebelión un artículo de Manuel M. Navarrete titulado “Trotsky no existe” y que aboga “por un marxismo creativo”. El texto, en el que se percibe un sano esfuerzo por colocar aspectos de carácter teórico-histórico, aborda un tema central y, quizás, uno de los más polémicos en las filas del marxismo: la distinción entre el trotskismo y el stalinismo. Un asunto apasionante y, aunque el autor del artículo no opine igual, muy vigente.
México: ¿Qué hacer en Oaxaca: Ulises el asesino o la socialdemocracia aliada con Calderón?
Fallecía el 25 de enero de 1987
Nuestro fundador y maestro Nahuel Moreno fue uno de los más consecuentes y destacados continuadores de la lucha de León Trotsky por construir la Cuarta Internacional. En este nuevo aniversario de su desaparición, reproducimos un reportaje de 1985 en el que sintetizó el significado del trotskismo.
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Nahuel Moreno, 1985 |
Cristina dijo recientemente al justificar el llamado Fondo del Bicentenario para pagar más deuda externa: “Cuando era más jovencita, en los años 70, me hubiera visto vociferando contra el imperialismo yanqui, contra el FMI. Hoy tengo 56 años, ahora soy presidenta de todos los argentinos… Las reservas son de todos los argentinos, pero las deudas también, y tenemos que hacernos cargo”. (Crítica, 17-01). La frase -además de develar el mentiroso verso populista de “prometo una cosa y cuando gobierno hago otra”- , se derrumba ante la cruda realidad.
Haití recibe ayuda “humanitaria” de cínicos saqueadores que lo han mantenido en la miseria y el hambre
1. Haití ha funcionado a través de sus últimos 100 años como una base militar yanqui. En el siglo XX y lo que va del XXI, el país ha vivido bajo la bota militar de los EEUU y de la dinastía familiar de papá y baby Doc Duvalier. Ha sido desde entonces el país más miserable del continente americano y no sé que lugar ocupe en el mundo entre otros países de África, también sometidos a la explotación y el saqueo. Los terremotos, sismos, huracanes, inundaciones, siempre o casi siempre, sólo han dañado a los pueblos pobres y miserables que no han tenido posibilidad de defenderse. ¿Por qué los trabajadores explotados y miserables se ven obligados a vivir sobre fallas volcánicas, en territorios bajos expuestas a inundaciones, bajo cables de alta tensión o construyen casas con materiales perecederos? ¿Por qué ante los peligros no pueden movilizarse?
Tucumán: La Fetraccom repudia y se solidariza con la trabajadora de prensa
La Comisión Nacional de Libertad de Expresión y Formación Profesional (CNLE)– Asociación de Prensa de Tucumán (federación de Trabajadores de la Cultura y la Comunicación (Fetraccom) manifiesta su más profundo repudio a los actos de Extorsión, Acoso y Precarización laboral sufridos por la trabajadora Roxana Bazán periodista y corresponsal de la Radioemisora repetidora de CADENA TRES en Tucumán.
Zona de catástrofe fuera de control
¿Quién es el beneficiario?: Se aproxima un desenlace en Haití
Los viejos manuales de estrategia enseñan un principio: La mejor conquista es aquella que se hace en carácter de «salvador» y no de «invasor». Es la lógica del Chapulín Colorado que hoy aplica EEUU en Haití.
Por Manuel Freytas (*)