Las mujeres, en Siria revolucionaria, por el derecho de tener derechos
Publicado en el boletín Al Thawra *.
Una rosa en el desierto. Ese fue el título que Joan Juliet Buck, de la revista Vogue America, escogió para un artículo sobre Asma Al Assad, la primera dama de Siria. Tan constreñida quedó la publicación, después de la lluvia de críticas que recibió, que el artículo ni siquiera consta en sus archivos. En un país de sombras, dice el material, Asma Al Assad dirige su casa democráticamente. El artículo no fue ningún fenómeno autónomo; la prensa occidental ha presentado, consistentemente, a las primeras damas árabes (la reina Rania, de Jordania y Sheikha Moza, de Quatar), como importantes figuras públicas y modelos de femeneidad en la región. Cualquier análisis superficial de los medios de comunicación del régimen, tanto los occidentales como los locales, revela la institucionalización sistemática de las primeras damas, convirtiéndolas en referencia ideológica, delimitando, así, las fronteras de actuación de las mujeres.