Ataques de las fuerzas imperialistas en Libia han dejado al menos 100 civiles muertos. Algunos cadáveres carbonizados e irreconocibles
En Libia el sistema tocó fondo. La decadencia y la irracionalidad de las potencias dominantes se muestra en todo su esplendor. En vivo y en directo. La variable de ajuste es el petróleo. La lógica funcional es el asesinato masivo. El show lo ponen las bombas y misiles de última generación, la muerte y el sufrimiento corre por cuenta del pueblo libio. La CIA divide, el Pentágono extermina, La ONU santifica. Las potencias centrales acompañan. Pero sólo acompañan al ganador. Un dato clave para entender lo que viene.
Por Manuel Freytas (*)
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IAR Noticias/
Traducido por M.A.R. |
Seyyed Nasrallah, Secretario General de Hizbullah, se dirigió, el pasado sábado 19 de marzo, a los asistentes a un acto organizado por Hizbullah en apoyo a las revoluciones de los pueblos árabes, en el recinto de Seyyed Ash-shuhada en el barrio del sur de Beirut.
Traducido del inglés para Rebelión por Germán Leyens |
El ataque militar de Estados Unidos, Gran Bretaña, Francia y otros países imperialistas a Libia, con la autorización del Consejo de Seguridad de la ONU , no va para salvar al pueblo libio de la dictadura de Gadafi, sino a intentar una “solución” favorable al imperialismo a la crisis de Libia.
Estados Unidos, Gran Bretaña, Francia y otros países imperialistas han lanzado un ataque militar, basado en bombardeos de misiles y aviones, sobre Libia, afectando a las tropas de la dictadura de Gadafi. El campo de la intervención, aprobada por el Consejo de Seguridad de la ONU, es suficientemente vago y amplio como para permitir la libertad de maniobra de los atacantes que, reiteramos, no van para defender al pueblo libio como lo dicen, sino a intervenir para frenar el proceso revolucionario libio, con o sin Gadafi, y frenar a todo el proceso revolucionario árabe.
Terminó la cuenta regresiva. El presidente francés, Nicolas Sarkozy, anunció que ya comenzó la intervención militar sobre Libia y hay más de 20 aviones de combate que sobrevuelan la ciudad libia de Bengasi.
A casi dos horas de una reunión con más de veinte líderes mundiales (pero con la ausencia de Rusia y China), el mandatario aseguró que ya hay aviones franceses sobrevolando la ciudad de Bengasi, bastión de los opositores libios, con el fin de impedir posibles ataques aéreos en la región en manos de las fuerzas de Muamar Kadafi.
Respuesta a la intervención militar
Luego de que EEUU, Reino Unido y Francia anunciaran (tras la resolución del Consejo de Seguridad) que iniciarían acciones militares inmediatas contra Libia, el régimen conducido por Muamar Kadafi, en una clara respuesta táctica orientada a quitarle argumento y fundamento a la invasión internacional contra su país, declaró unilateralmente un «alto el fuego» en «acatamiento» de la resolución de la ONU. El gobierno de Kadafi anuncia que la medida está destinada a «proteger a los civiles» y a «resguardar los derechos humanos», la base argumental (formal, ya que el verdadero objetivo es el petróleo) que esgrimió Naciones Unidas para autorizar las acciones militares contra Libia. Esta resolución, alimentó finalmente la acción táctica de Kadafi de declarar un «alto el fuego» dentro de una maniobra dilatoria orientada a neutralizar o retardar el ataque militar en preparación. La medida anunciada por el líder libio parece orientada estratégicamente a profundizar las divisiones de la OTAN y a agudizar las contradicciones de EEUU y la Unión Europea en torno del petróleo libio. En una primera reacción, Francia afirmó que Kadafi continúa siendo una «amenaza». La línea que seguramente seguirán EEUU y Reino Unido, que completan el trípode que anunció un ataque a Libia «en horas».
Informe
IAR Noticias/
Más de 200 personas heridas este viernes por disparos de armas de fuego a una manifestación contra la dictadura. El Consejo de Seguridad no se ha pronunciado
Sanáa.- Al menos 50 personas murieron y más de 200 resultaron heridas este viernes por disparos de armas de fuego contra una multitudinaria manifestación que reclama la salida del dictador yemení, Alí Abdalá Saleh, quien decretó el estado de emergencia en el país.