Esta mañana tomó relevancia la difusión de un video filmado por vecinos de la salina «El Leoncito». En las imágenes se observa la precariedad y la destrucción que ocasionan las empresas que están extrayendo litio en una de las pocas fuentes acuíferas de la zona. Las denuncias coinciden con el inicio de las audiencias de la asamblea constituyente que reformará la constitución y en el cual alertan que se modifiquen legislación que favorezca a las empresas mineras. Las y los pobladores temen que la situación jujeña se repita en La Riojas. Por ANRed
En el video se observa las precarias contenciones de agua y sales que ha implementado la empresa que funciona en la Salina El Leoncito que es uno de los 23 proyectos mineros de litio de la provincia. Hay hasta una pileta pelopincho que desentona con la majestuosidad del paisaje. Detrás se puede observar las tomadoras, excavadoras y camiones que remueven las salinas de donde fluye el agua que alimenta el medio ambiente cumpliendo la función de reservorios naturales hídricos escasos en la zona.
La Asamblea por la Vida de Chilecito y las Mujeres Defensoras del Agüita del Famatina apuntaron contra el gobierno del peronista Ricardo Quintela al que denuncian por estrago ambiental y destrucción irreversible de la Salina El Leoncito, en la cordillera riojana.
JOSEFINA L. MARTÍNEZ En la protesta confluyen las comunidades en defensa de sus territorios, la lucha docente por el salario y la rabia de la juventud contra la represión del gobierno.
Decenas de piquetes cortan las rutas en Jujuy, al norte de Argentina. En la protesta confluyen las comunidades en defensa de sus territorios, la lucha docente por el salario y la rabia de la juventud contra la represión del gobiernoSi Josep Borrell dijo hace muy poco que Europa era un “jardín” y el resto del mundo una “selva”, Ursula Von Der Leyen, con idéntico espíritu de conquista, considera el “triángulo del litio” (norte de Chile, Bolivia y Argentina) como una zona estratégica para las arcas imperiales. En su reciente gira por Latinoamérica, la representante de la UE puso el foco en el nuevo “oro blanco”, como se conoce al litio. Un mineral clave para la producción de baterías eléctricas, como las que llevan los teléfonos móviles y los coches eléctricos. Detrás de la “transición verde” europea se esconde un brutal saqueo, la destrucción de los bienes comunes naturales y el expolio de pueblos enteros. Sin embargo, contra toda resignación, la última palabra no está dicha, porque hay resistencia y la rebeldía está en las calles.
En medio de un frío extremo, en la región de la puna y en la Quebrada de Humahuaca, los piquetes de las comunidades originarias reciben el apoyo de docentes y personal sanitario. Al costado de la ruta, han montado carpas para pasar la noche y “postas” sanitarias. Los videos se viralizan en redes sociales. Mujeres kollas, quechuas y de otras comunidades emocionan por su coraje. Los mineros llegan cantando: “Libres o muertos, jamás esclavos”. Las estudiantes abren las puertas de la universidad a quienes se han movilizado hasta la capital provincial. Las docentes mantuvieron una huelga indefinida durante más de tres semanas y las maestras de escuelas primarias aún siguen en huelga al grito de: “¡Abajo la reforma, arriba los salarios!”. Los más jóvenes se suman al movimiento y ocupan decenas de institutos. Son postales de lo que ocurre estos días en Jujuy. No lo encontraréis en las portadas de los medios internacionales, pero allí se está gestando algo nuevo.
Esta rebelión obrera, indígena y popular ya lleva varias semanas. La chispa la encendió el masivo rechazo a una nueva constitución provincial antidemocrática, aprobada de forma exprés por el gobernador Gerardo Morales y la casta política tradicional (la UCR, que conduce el gobierno local y el peronismo, que acompañó la votación). El nuevo texto constitucional abre las puertas a la entrega de tierras comunitarias para la explotación extractivista del litio, al mismo tiempo que criminaliza la protesta social. Hay que decir que el texto pretendía incluir también otras medidas antidemocráticas, como la limitación del derecho al voto y darle mayoría automática al gobernador. Pero tuvieron que eliminar esos artículos, producto de la movilización popular. En esto, jugaron un papel destacado los constituyentes del Frente de Izquierda, quienes denunciaron todas las negociaciones, entre gallos y medianoche, de la casta política provincial, mientras exigieron que se televisaran las sesiones. Finalmente renunciaron antes de que se votara, poniendo en evidencia el tremendo fraude. Esto ayudó a que miles de manifestantes redoblaran su exigencia de tirar abajo esa reforma antidemocrática.
Escribe Nicolás Núñez, por Ambiente en Lucha e Izquierda Socialista
En un artículo escrito por nuestro compañero Agustín Gigli, integrante de la Asamblea No a la Mina Esquel, desarrollamos una crítica a las posiciones que nuestres compañeres del Frente de Izquierda Unidad están levantando en el marco de los debates del año electoral en curso, y en particular, ante las monumentales promesas que se venden respecto de que la explotación de litio sería la vía de resolver buena parte de los problemas económicos del país. Escribimos aquel artículo, centralmente, porque vemos que las propuestas y proyectos que están siendo impulsados corren el riesgo de posarse sobre la misma promesa extractivista, abriendo un curso de colisión entre la izquierda y los reclamos de los territorios.
Les compañeres de PO, respondieron a nuestra crítica en un texto bastante particular, dado que: a) elude responder al eje de nuestro planteo, a saber, que su propuesta de campaña se sostiene sobre la idea de la continuidad de la explotación megaminera, pero bajo otra lógica de propiedad; b) terminan por plantear que en realidad su política para el litio es sólo realizable bajo un gobierno de les trabajadores, sin ninguna consigna intermedia o transicional de por medio; y c) nos invitan a “debatir” a un acto divisionista de proclamación de sus candidaturas para las PASO.